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Cirugía robótica: reconstrucción de lesiones del sistema urinario

La cirugía robótica puede emplearse eficazmente en la reconstrucción de lesiones o malformaciones del sistema urinario, proporciona beneficios importantes a los pacientes y una significante ayuda al cirujano. Además, es de gran utilidad para reparar lesiones provocadas en la vía urinaria, ocasionadas por cirugías previas, o bien, por lesiones congénitas.

¿Cómo está compuesto el sistema urinario?

Es el conjunto de órganos involucrados en la formación y evacuación de la orina. 

Está compuesto por:

Riñones: Órganos cuya función es eliminar los desechos líquidos de la sangre en forma de orina, mantener un equilibrio entre sales y otras sustancias en la sangre, y producir eritropoyetina (hormona que ayuda a la formación de glóbulos rojos).

Uréteres: Son dos tubos estrechos que trasladan la orina de los riñones hacia la vejiga. 

Vejiga: Órgano ubicado en el abdomen inferior. Posee unas paredes que se relajan y dilatan para acumular la orina. Asimismo, se contraen y aplanan para vaciarla a través de la uretra.

Músculos del esfínter: Músculos circulares que se cierran herméticamente alrededor del orificio de la vejiga, ayudando a que la orina no gotee.

Nervios de la vejiga: Se encargan de avisar a la persona cuando es momento de orinar.

Uretra: Conducto encargado de expulsar la orina contenida en la vejiga.

Cuando se presentan lesiones o malformaciones en el sistema urinario, es de gran utilidad hacer uso de uno de los procedimientos quirúrgicos más importantes y eficaces en la actualidad: la cirugía robótica.

¿Qué es la cirugía robótica?

La cirugía robótica es un método de invasión mínima, permite al médico realizar procedimientos delicados y complejos con mayor control, flexibilidad y precisión.

¿Qué beneficios ofrece la cirugía robótica?

Proporciona una mejor visión a través de una ampliación tridimensional: la cámara de imágenes de alta definición captura la percepción de profundidad que no está disponible a los cirujanos que utilizan la laparoscopia estándar.

Micro – movimiento: Reduce al mínimo la pérdida sanguínea gracias a su zoom de 10x, su alta definición en imagen y la realización del procedimiento en tiempo real.

Mejor destreza y mayor precisión: Los brazos robóticos, equipados con instrumentos, pueden realizar movimientos de hasta 360 grados, rotando y curvándose de acuerdo a las decisiones del cirujano. Esto permite a los instrumentos de los brazos robóticos navegar dentro del cuerpo de una forma que resulta imposible a la mano humana. Asimismo, mejora la habilidad de realizar movimientos sutiles y complejos tales como maniobrar alrededor de áreas delicadas mientras se corta. También facilita otras actividades, tales como suturar.

Alta definición: Detecta y filtra los temblores en los movimientos del cirujano, no duplicando el robot.

Optimiza procesos: Brinda retroalimentación de la fuerza en combinación con el sistema de proyección 3D, lo que proporciona un sustituto para la sensación táctil; además ofrece óptimos tiempos de rendimiento, mayor precisión, mayor destreza en realizar suturas en un menor tiempo, reduciendo así el margen de error.

Todos estos beneficios que ofrece la cirugía robótica son perceptibles para los pacientes de la siguiente manera:

  • Menos dolor
  • Menor pérdida de sangre
  • Incisiones pequeñas y cicatrices mínimas
  • Menor riesgo de infección
  • Estadía hospitalaria más corta
  • Mejor recuperación y regreso temprano a las actividades diarias del paciente

De tal manera que atender las lesiones o malformaciones del sistema urinario mediante este procedimiento quirúrgico es la mejor opción tanto para el paciente como para el cirujano. 

En Robotic Surgery estamos para servirle.